Actualmente los procedimientos de liposucción se ven beneficiados con la utilización de diferentes tecnologías para minimizar el daño a los tejidos y obtener mejores resultados. Hoy quiero contarles las diferencias entre las dos tecnologías más frecuentemente usadas por nosotros los cirujanos plásticos durante la lipoescultura o liposucción las cuales, tanto la lipolaser y lipovaser, se pueden usar en todas las zonas del cuerpo donde haya grasa localizada
La Liposucción asistida por láser consiste en el uso de una fibra óptica de laser de diodo que concentra alta energía para que se convierta en calor, este calor disuelve la grasa. Requiere de varias pasadas de la fibra por la misma zona para que este efecto sea logrado, si esta alta energía no se maneja en manos expertas esto puede generar quemaduras, y claro está a mayor temperatura mayor riesgo de quemaduras, si bien es cierto el calor bajo la piel va a generar retracción el riesgo de lesión de estructuras de la piel es mucho mayor por eso debe usarse de una manera muy precavida en cada zona del cuerpo.
La liposucción asistida por ultrasonido o Lipovaser consiste que a través de unas cánulas con unos anillos en su punta generan unas ondas vibratorias que generan calor sobre la grasa y de manera selectiva la emulsifica, sin dañar las otras estructuras como los nervios o los vasos sanguíneos; esta tecnología permite que pueda permanecer más tiempo en contacto con los tejidos principalmente con la capa más profunda de la piel llamada dermis para lograr contracción y mayor retracción de la piel obteniéndose en gran medida corrección de la flacidez.
Ahora mi opinión personal y de acuerdo a mi experiencia es que si bien es cierto la literatura reporta que ambas tecnologías generan retracción de la piel, los riegos que se corren con el láser son altísimos, no solo de quemaduras sino aparición con mayor frecuencia de fibrosis por las altas temperaturas conseguidas con la fibra óptica del láser; con respecto al vaser he logrado obtener excelentes resultados de retracción de la piel, corrección de la flacidez y muy buena adherencia de la piel a los tejidos profundos como son los músculos, lo que facilita las definiciones y en algunos casos las marcaciones. He encontrado que mis pacientes sangran mucho menos en el procedimiento, y aunque duran más días drenando en los masajes post operatorios consigo que la inflamación sea menor y la recuperación sea más corta y menos traumática.
Una de mis mayores satisfacciones de incluir siempre la tecnología vaser o ultrasonido en mis procedimientos de liposucción está basada en la experiencia que las complicaciones son mínimas y los resultados en todos mis pacientes superan las expectativas incluyendo a los pacientes post bariátricos o post pérdida masiva de pes, quienes presentan un mayor grado de flacidez.
Definitivamente es mi tecnología de elección para acompañar en mis procedimientos de contorno corporal.
Recuerda siempre:
“Hazlo por ti y para ti!”
Dra. Jennifer Vera Bolívar
Cirujana Plástica
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